"¿Cómo me iba a perder esta oportunidad? Fidel, mucho más que un hombre, es una gran idea". Apenas apareció ayer en el Palacio de las Convenciones, el actor francés Gerard Depardieu se convirtió en un suceso mediático. Pero también desde un primer momento, dejó atrás la noción tópica del sistema de las estrellas. "Una idea es más importante que un hombre. Y es el hombre mismo. Por eso estoy aquí, de manera consecuente y natural".
Depardieu compartió ayer momentos del coloquio Memoria y Futuro: Cuba y Fidel, que estimuló reflexiones y vivencias sobre la impronta del líder de la Revolución cubana a propósito de su ochenta cumpleaños.
Vino acompañado de Roger Lannier, Michel Reybier y Gerard Bourgoin, empresarios franceses que mantienen una sostenida relación comercial con la Isla.
Depardieu se confiesa un veterano de Cuba. "He estado quince veces en esta isla y siempre descubro fuentes nuevas".
Al comentarle el impacto entre el público cubano de su actuación en los filmes sobre Asterix o en la versión televisual sobre Los miserables, de Víctor Hugo, comentó: "Me alegra que aprecien lo que puedo dar desde el arte. Mi corazón late junto a ustedes".
Manténgase en contacto
Síganos en las redes sociales
Subscribe to weekly newsletter