“Ayer cancelamos la última cuota de la deuda que nos dejó la cuarta república en el Banco Mundial, en el año 98 esa deuda era de casi 3 mil millones de dólares, hoy les puedo decir que no tenemos ni un centavo de deuda, ni con elFondo Monetario Internacional”, afirmó el presidente Hugo Chávez anoche durante el acto del quinto aniversario de su regreso al poder.

Afirmó que Venezuela se ha convertido en un centro de financiamiento de las hermanas naciones y puso como ejemplo a Argentina que también se liberó del FMI.

Chávez señaló que una de las siete líneas estratégicas es convertir al país en una potencia energética mundial. “Tenemos todo para hacerlo sólo que antes dependíamos del imperio”.

“Le he dicho a Rafael Ramírez que quiero acelerar un proyecto de grandes beneficios, se trata de sustituir el consumo, el despilfarro de gasolina y de combustible líquido por gas porque tenemos suficiente gas para hacerlo, en los próximos días aspiro a no utilizar un litro de gasolina que contamine”.

Sobre la propiedad privada, reiteró que implementarán nuevos tipos de propiedad a través de las empresas de propiedad social y otros organismos que están creando.

También mencionó la idea de que la nueva Fuerza Armada se acople al proyecto socialista. “creo que llegó la hora de que la FAN se conforme como industria socialista de propiedad social”.

Sobre la posibilidad de que se produzca un acto de desestabilización en el país, dijo: “Cualquier agresión contra nosotros debe ser neutralizada y respondida para seguir cabalgando en la revolución y construir el socialismo”.

Dijo que estaría preparado para cualquier plan golpista que pudiera producirse el 28 de mayo, fecha cuando vence la concesión de Radio Caracas Televisión. “Ya tenemos el plan de contraataque para el 29 de mayo”.

Imperialismo

Antes de la concentración en la avenida Urdaneta, el Mandatario enfatizó que la revolución es antiimperialista. “No hay ninguna posibilidad de entendimiento de nuestra revolución con la oligarquía venezolana y con el imperio norteamericano. Podemos coexistir, sí (...) pero nunca entendernos”.

Reiteró sus acusaciones contra el gobierno de Estados Unidos de promover el golpe de Estado del 2002. “Unos meses antes, el Gobierno norteamericano había decidido invadir a Irak, en noviembre del 2001; y en diciembre (del mismo año) tomaron la decisión en la Casa Blanca: Hay que derrocar a Chávez”, aseguró.

“Cobarde aquellos que en el 2002 trataron de masacrar y arrodillar al pueblo venezolano al imperio norteamericano (...) que más nunca ocurra esto en Venezuela (...) Cueste lo que nos cueste esta tierra será libre. Aquí nos trajo la historia: Patria, socialismo o muerte”, dijo el jefe de Estado.

Planes de asesinato

Chávez denunció, durante el acto en la Academia Militar, que el imperio de Estados Unidos y la oligarquía criolla preparan nuevas conspiraciones para sacarlo del poder, intervenir el país y asesinarlo.

“Siguen acariciando la idea de derrocar al Gobierno bolivariano, o de intervenir a Venezuela, o de liquidar al presidente venezolano”, dijo.

El Mandatario, vestido con uniforme militar de faena y boina roja, advirtió que “cualquier intento de desestabilización en contra del Gobierno revolucionario, contra el pueblo venezolano, contra la revolución bolivariana, será respondida de manera contundente”.

“Si Estados Unidos lanza una nueva agresión contra nosotros, no habría una gota de petróleo más para ellos (...) El crudo no se nos va a podrir”, dijo.

Instó al presidente norteamericano George Bush a que “respete nuestro país, nuestro pueblo, nuestra democracia y ojalá que respetara al mundo”.

Chávez hizo un llamado a los militares venezolanos a asumir un rol de “soldados revolucionarios porque estamos retomando esa raíz originaria, debemos asumir el socialismo como el proyecto a construir junto con el pueblo”.

Destacó, al realizar un balance de esos días del 2002, que “el coraje del pueblo y sus soldados nos permitió pasar unos límites. Aquellos hechos actuaron como un disparador que nos impulsó a la profundización revolucionaria”.

Asimismo, exigió que “nunca más soldado alguno sea utilizado en contra de los intereses sagrados de su propio pueblo”.

“Patria, socialismo o muerte es la consigna que todo soldado venezolano debe cargar en el alma”, sentenció.