En Estados Unidos muere un niño cada tres horas por heridas de balas, según un informe del Fondo para la Defensa de la Niñez citado por el Diario La Prensa de Nueva York.

El rotativo indica que el estudio “conmueve hasta el hueso” y reporta que 2.867 niños murieron de heridas de bala en el 2002.

Eso significa que fallecen 239 niños al mes, 55 niños por semana, 8 niños al día, un niño cada tres horas, aclara.

Agrega que entre jóvenes y pre-adolescentes, aquellos en edades de 10 a 19 años, las armas de fuego son la segunda causa de muerte, sólo superada por accidentes de autos.

Precisa que en Nueva York en el 2002, un total de 91 niños murieron, 74 muertes fueron homicidios; 14 suicidios, y tres accidentes.

En Nueva Jersey, 32 niños murieron de heridas de bala y en Connecticut 15, agrega.

El fenómeno no tiene distingo de razas. Nacionalmente 1.639 niños que murieron eran blancos 1.112 negros.

De 1990 al 2002, 10.000 niños latinos y jóvenes murieron.

Además, el estudio muestra que 21 estados y Washington, D.C. vieron incrementarse el número de muertes por armas de fuego durante el año 2001, incluyendo Nueva Jersey.

El Fondo criticó a la administración del presidente George W. Bush por permitir que expirara la prohibición de armas de asalto el año pasado.