El chileno José Miguel Insulza nuevo Secretario General de la OEA.
Foto OEA.

La Organización de Estados Americanos (OEA), acaba de elegir a un nuevo Secretario General que, por primera vez en su historia, no fué el candidato indicado por los Estados Unidos de Norteamérica. La OEA agrupa a todos los paises del continente americano, a excepción de Cuba, que fué excluida de manera arbitraria de dicha organización por su postura anti-Estados Unidos en enero de 1962, y por presión del gobierno del entonces presidente John F. Kennedy.

La elección de José Miguel Insulza, propuesto por Chile y apoyado firmemente por los Gobiernos de Venezuela, Brasil, Uruguay, Argentina y Panamá, dió al traste con los candidatos presentados en esta oportunidad por los Estados Unidos, Francisco Flores primero y Luiz Ernesto Derbez después, quienes tuvieron que declinar sus candidaturas ante la imposibilidad del apoyo de la mayoría de los gobiernos del continente, que se negaron a seguir, como en el pasado, a dar el voto a un candidato impuesto por la potencia militar y económica norteamericana..

Esto demuestra de alguna forma que las naciones latinoamericanas están en la búsqueda de una independencia político-económica que se viene impulsando, sin lugar a dudas, desde el gobierno revolucionario venezolano que dirige Hugo Chávez.

La situación de miseria, injusticia y desigualdad que impera en América Latina, sin que de nada haya servido la vecindad con los Estados Unidos, hace que los latinoamericanos vean cada dia con mayor recelo al vecino del norte, pues lo perciben como un gigante que se ha venido alimentando y fortaleciendo en gran medida con sus riquezas, sin recibir nada a cambio, y sobre todo cuando les tratan de imponer una democracia según patrones extraños a su realidad, que no resuelve los problemas de la población, que vive en su gran mayoría, con altos indices de pobreza.

En la reciente visita de la Señora Rice, Ministra de Asuntos Exteriores del Presidente Bush a Suramérica, se demostró que los pueblos y gobiernos de la región han ido tomando y apoyando las banderas de la unidad y solidaridad latinoamericana que pregona Hugo Chávez, como única forma de contrarrestar la política norteamericana de imponer primero una democracia en la región según su criterio , dejando en segundo término la lucha contra la pobreza a la cual contrapone el gobierno venezolano una ecuación diferente: combate a la pobreza y al analfabetismo y luego una democracia con participación popular activa.

Otro elemento importante que se gesta en Suramérica es la conformación de un gran bloque geopolítico que permita a los más de 500 millones de seres humanos que allí viven, explotar de manera racional las inmensas riquezas que poseen en su suelo, tanto energéticas como de agua, flora y fauna en pro de su desarrollo y posterior intercambio con el resto del mundo en condiciones de igualdad.

Esta posibilidad es vista con agrado por los pueblos suramericanos que consideran que ahora si estan en el camino de la independencia y desarrollo económico, político y social.

Con la elección del chileno Insulza como Secretario General de la OEA, se abren nuevas espectativas en la región para fortalecer este organismo y hacerlo verdaderamente autónomo y no sometido, como hasta ahora, a los mandatos de los gobiernos norteamericanos y podría ser la época en que la OEA permita el reingreso de Cuba a dicha organización, lo cual le corresponde por razones legales,históricas y geopolíticas. Esta posibilidad será, seguramente, motivo de gran polémica y discusión en el seno de este organismo americano, pués la política norteamericana es la de acentuar el embargo que por más de cuarenta años ha impuesto a la isla caribeña, será una prueba más a la voluntad unitaria de los paises latinoamericanos.

Igualmente la OEA dirigida por Insulza, deberá estar atenta y demostrar imparcialidad y firmeza ante los hechos que se suceden ahora mismo en varios paises latinoamericanos como el caso de Ecuador, Bolivia, Perú, Haiti y Nicaragua, para evitar y condenar posibles intervenciones de los Estados Unidos, de manera unilateral, en casos de crisis internas en esos o en cualquier otro pais del continente, como fueron en el pasado las invasiones a la República Dominicana (1965), Panamá (1992), Grenada (1983) , Chile (1973) y Haití (2004), donde la acción de la OEA brilló por su ausencia.

Pero al márgen de todo este ajederez político surge un nuevo elemento que obviamente no gustará mucho a la administración Bush, y es que en los próximos dias 10 y 11 de mayo de 2005, se ha anunciado una reunión cumbre en Brasil, entre gobiernos de los paises árabes y de latinoamérica , todo enmarcado dentro de la política de pluripolaridad y autodeterminación de los pueblos que impulsa el Presidente venezolano Hugo Chávez. Habrá que esperar los resultados de esta reunión y la respuesta de los Estados Unidos. Por ahora, los latinoamericanos tienen la iniciativa.