Varadero Golf Club

Cancún, Riviera Maya y República Dominicana, tres de los lugares turísticos más importantes de la región, destacan en esta práctica, con una infraestructura de 50 campos calificados como proezas de la arquitectura paisajística.

En Cuba, el desarrollo de este segmento cuenta con dos centros, el Varadero Golf Club, con 18 hoyos y 69 hectáreas, y el de Capdevila, en Ciudad de La Habana.

Sin embargo, expertos como Peter Walton, jefe ejecutivo de la Asociación Internacional de Operadores de Turismo de Golf con base en Londres, consideran que la Isla podría convertirse en una potencia en esta actividad.

Recientemente las autoridades cubanas aprobaron proyectos para la construcción de 16 campos de golf con el propósito de revertir la carencia de estas instalaciones, pero también existe otro obstáculo más inquietante.

En la región, Estados Unidos, ubicado a solo 145 kilómetros de la Mayor de las Antillas, figura como el principal mercado emisor, con un potencial aproximado de 27 millones de aficionados, sin embargo el gobierno les prohíbe a sus ciudadanos viajar a la nación caribeña.

Quienes se atreven a desafiar las restricciones sufren luego las consecuencias, con multas desproporcionadas y otras medidas coercitivas.

Según indican las encuestas sobre esta modalidad, el jugador de golf viaja hasta nueve veces al año, y más del 43 por ciento de los practicantes supera esta cifra.

En Estados Unidos, el 45 por ciento de los amantes de este deporte, acostumbra a participar en torneos fuera de las fronteras y como parte de las vacaciones, pero lamentablemente Cuba siempre será un destino vedado mientras persistan las obsoletas restricciones de la administración norteamericana, que impone un férreo bloqueo a la Isla.

Agencia Cubana de Noticias