Los encuestadores están sorprendidos por el magnífico desempeño alcanzado por la candidata presidencial, la Sra. Marine Le Pen en la primera ronda de las elecciones presidenciales francesas del domingo 22 de abril de 2012. Ella obtuvo a su nombre la cantidad de 6’421,773 millones de votos ciudadanos, la puntuación más alta jamás realizada por este partido, el Frente Nacional (Front National FN).

Por un lado, los medios de comunicación consideran que la mutación de este partido es algo puramente estético y superficial, persisten en seguir caracterizándolo como un partido de la extrema derecha [y racista], los mismos medios de comunicación aseguran por otro lado que los partidarios de esta agrupación política votarán en la segunda ronda, una mitad por el [candidato de izquierda (Francois Hollande) y la otra mitad por el candidato de la derecha (Nicolas Zarkozy y actual presidente) como lo harían los miembros de un auténtico y clásico partido republicano.

Parece que el Front National ha crecido en forma sostenida desde mediados de los años 80, a pesar de un contratiempo en su ascensión. Fue su pérdida de atracción en la primera ronda de la elección presidencial del año 2007 y esto se debió a la pérdida de una gran parte de su electorado que fue a votar por Nicolas Sarkozy. El entonces ministro del Interior [Sarkozy] pareció capaz de ejercer el poder soberanamente y satisfacer así sus reivindicaciones. Sin embargo, estos votantes se sintieron decepcionados de inmediato y se alejaron de él.

Ellos han votado ahora en bloque a favor de la Sra. Marine Le Pen. Si el análisis de los encuestadores y medios de comunicación son exactos, estos votantes darán nuevamente sus votos a Nicolas Sarkozy en la segunda ronda, el cual podrá ser elegido otra vez (esta condición no es suficiente pero es necesaria). Pero si los encuestadores y medios de comunicación se equivocan en su análisis y que el partido Front National (Frente Nacional) ha efectuado una verdadera mutación, una verdadera transformación política, aquella de un antiguo partido compuesto de perdedores de la Segunda Guerra Mundial o de las guerras coloniales francesas buscando una revancha, y sí su transformación hoy en día en un partido de oposición a la oligarquía francesa gobernante es real, como lo sostiene la Sra. Marine Le Pen y su padre Jean-Marie Le Pen, fundador de este partido, entonces estos votos no irán para Nicolas Sarkozy sino para el candidato socialista, entonces Sarkozy será derrotado.

Durante la campaña electoral, en la primera ronda, la Sra. Marine Le Pen ha oscilado entre dos discursos. Por un lado, la defensa de la independencia y soberanía de Francia, por el otro, la defensa de una identidad de concepción chovinista. Numerosos ciudadanos que votaron NO en el referéndum de 2005 respecto a la alternativa de elegir una Constitución Europea, consideran hoy que el Front National es sólo una versión descolorida del viejo partido xenófobo de ayer y han votado por esa razón en contra de él, sobre todo a favor del Frente de Izquierda del Sr. Jean-Luc Melenchon; pero queda un enorme potencial, «un gran reservorio de votos a explotar» en ese sentido porque el NO de los votantes contra la Constitución Europea había alcanzado un total de 15’449,508 millones de voces.

El comportamiento electoral de los partidarios del Front National en la segunda ronda será decisiva e indicará si este partido es sólo el catalizador ocasional de un voto de protesta o si se ha convertido en una verdadera fuerza de oposición al sistema dominante, como lo ha afirmado la Sra. Marine Le Pen el domingo 22 de abril en la noche.