El Hezbollah respondió el 28 de enero de 2015 al ataque israelí perpetrado 10 días antes en Quneitra, en territorio sirio [1].

En respuesta a aquel ataque, que costó la vida a varios oficiales de esa organización de la resistencia libanesa y de los Guardianes de la Revolución iraníes, el Hezbollah atacó un convoy militar israelí en las Granjas de Shebaa, territorio libanés ocupado por Israel.

La acción del Hezbollah, que los estrategas israelíes han calificado como «muy compleja», dejó 2 bajas según el ejército israelí, 4 según la prensa de Israel y 17 según la prensa de la resistencia libanesa.

El Hezbollah comunicó a la FINUL su intención de limitarse a esa acción destinada a vengar a sus muertos de Quneitra. Pero también hizo saber que sus hombres están listos a entrar en guerra si así lo quiere Israel.

Las fuerzas israelíes reaccionaron bombardeando las localidades libanesas de Kfar Chouba, Majidiyé, Halta y Arkoub. Un soldado español de la FINUL murió en los nuevos bombardeos israelíes, a pesar de lo cual la FINUL ha optado por no acusar a Israel y atribuye la muerte del «casco azul» a un disparo de origen indeterminado.

Aunque el ministro israelí de Relaciones Exteriores Avigdor Lieberman reclamó de inmediato a Tel Aviv una reacción «dura y desproporcionada», el primer ministro Benyamin Netanyahu declaró que «si los ataques continúan responderemos con fuerza».

Durante toda la semana, los expertos israelíes habían comentado el ataque israelí contra Quneitra subrayando que el Hezbollah no se atrevería a responder por temor a tener que enfrentar una guerra contra Israel en momentos en que ya se encuentra «atascado» en Siria. Muchos de esos expertos israelíes incluso calificaron el ataque de Quneitra de «golpe maestro» de Netanyahu en plena campaña electoral.

Sin embargo, nuestro sitio de información alternativa había señalado que la situación en el frente sirio ha ganado en estabilidad y que el Hezbollah ya había recuperado su capacidad de respuesta como consecuencia del arresto de Mohammad Chawraba, el espía de Israel infiltrado en el alto mando militar de la resistencia libanesa.

[1«Israel asesina oficiales del Hezbollah y de Irán en Siria», Red Voltaire, 20 de enero de 2015.