Los líderes de la Hermandad Musulmana y de sus organizaciones armadas –como al-Qaeda y el Emirato Islámico (Daesh), entre otras– están saliendo de Trípoli, la capital libia, y reagrupándose en Turquía.

Este movimiento comenzó desde que se anunció la ruptura de relaciones diplomáticas entre Arabia Saudita y Qatar.

Es por lo tanto muy probable que asistamos próximamente a una relativa clarificación de la situación en Libia, donde al menos uno de los tres gobiernos actualmente existentes acabaría disolviéndose.

Una reorganización total de las alianzas está teniendo lugar en el Medio Oriente.