Ataques contra oficinas del Mossad israelí, una base militar de Estados Unidos y otra base militar ‎de Turquía se reportaron los días 13, 14 y 15 de abril de 2021 en la ciudad de Erbil, capital del ‎Kurdistán iraquí. ‎

Por primera vez, esos ataques no se realizaron con el uso de cohetes sino con drones –artefactos ‎volantes no tripulados. ‎

La prensa local vincula el primer ataque con el enfrentamiento entre Israel e Irán y atribuye ‎los otros dos a un grupo hasta ahora desconocido, identificado como Awliyaa al-Dam (Los ‎Guardianes de la Sangre). ‎

Por su parte, la prensa iraní atribuye los 3 ataques al grupo de la resistencia chiita denominado ‎‎Saraya Olia al-Da.‎

El gobierno regional del Kurdistán iraquí desmintió la existencia de instalaciones israelíes en ‎su territorio y afirmó que el anuncio del ataque contra una instalación del Mossad era una noticia ‎falsa. ‎

La familia Barzani, que detenta el poder en el Kurdistán iraquí desde la época de la operación ‎‎“Tormenta del Desierto”, en 1991, creó allí una región autónoma kurda aprovechando la zona de ‎exclusión aérea que Estados Unidos y el Reino Unido impusieron al entonces presidente de Irak, ‎Saddam Hussein. Poco a poco, ese feudo de la familia Barzani terminó convirtiéndose en una ‎colonia de Israel en suelo iraquí. ‎