Turquía ha creado una “Organización de Estados Turcos” que incluye un “Consejo de Cooperación ‎de Estados de Lengua Turca”. La formación de esas entidades tiene lugar a raíz de la victoria ‎militar de Azerbaiyán –respaldado por Turquía– en la región del Alto Karabaj. ‎

Los miembros de la “Organización de Estados Turcos”, cuya creación se anunció el 12 de ‎noviembre, son Azerbaiyán, Kazajastán, Kirguistán, Uzbekistán y la propia Turquía mientras que ‎Hungría y Turkmenistán tendrán el estatuto de observadores. ‎

Después de haber vacilado por largo tiempo entre convertirse en miembro de la Unión Europea y ‎reconstruir el imperio otomano, Turquía opta ahora por una tercera vía: asumir el liderazgo de los ‎pueblos turco parlantes. ‎

Rusia y China no verán con simpatía esta maniobra de Turquía ya que las dos superpotencias ‎crearon la Organización de Cooperación de Shanghai precisamente para evitar el separatismo en ‎Asia Central. Además, en China existe una región –Xinjiang– donde se habla turco, aunque la ‎etnia uigur, mayoritaria en esa región, no tiene ningún vínculo‎ étnico con los turcos, a quienes ‎estuvo sometida en el pasado. ‎

La primera consecuencia de la creación de la “Organización de Estados Turcos” ha sido una ‎reanudación de los combates entre Azerbaiyán y Armenia. ‎