El Premio "Nóbel de la Paz" ha sido concedido al ex presiente de los Estados Unidos Jimmy Carter.

¡Bien merecido! El alto honor ha sido concedido no solo por su conducta a favor de la paz mientras estuvo en la presidencia de su país sino también porque el resto de su vida hasta hoy la ha dedicado a defender los Derechos Humanos en el mundo y a servir de observador imparcial en los procesos electorales de otros países donde ha estado en duda la honestidad de sus elecciones.

El nombre del ex mandatario norteamericano es un símbolo de paz y de honestidad en todas partes del mundo, menos por supuesto en Miami donde la extrema derecha cubana con su aparato de asquerosa difamación, que controla los medios de información, ha tratado de manchar la limpia imagen de este norteamericano ejemplar.

Coincide la designación del premio Nóbel de la Paz a Jimmy Carter con dos acontecimientos que le tocan bien de cerca al honorable ex presidente. Uno es la aprobación por parte de la Cámara de Representantes y el Senado de los Estados Unidos de una resolución que otorga al Presidente Bush poderes supremos de guerra cuando lo que hay que buscar es la paz. El Premio al Ex presidente Carter es en cierto sentido una crítica a Bush, como lo ha señalado públicamente el propio Presidente del Tribunal de Oslo al hacer público el veredicto confiriendo el Premio al ex Presidente.

Carter es un hombre serio y estos no son tiempos de "payá-sos"

Coincide también el otorgamiento de tan alto honor al ex presidente norteamericano con la concertada retirada de lo seis Comisionados de origen cubano del Condado Miami-Dade de una sesión municipal para así frustrar una resolución según la cual las próximas elecciones en Miami serían supervisadas por observadores de una institución imparcial de New York dada las dudas sobre la honestidad electoral en el sur de La Florida.

Hoy es viernes de micrófono abierto en Radio-Miami. Con la moderación de Carmen Duarte discutiremos sobre el Premio Nóbel al ex presidente Carter, sobre los poderes de guerra otorgados al Presidente Bush y la vergonzosa conducta de los Comisionados de origen cubano del Condado Dade que han convertido a Miami en una ciudad de trampas electorales al estilo de las corruptas republicas bananeras de América Latina.