Con gran satisfacción leí el domingo 26 de septiembre, en la página Política A3 una nota dirigida a nosotros sus lectores, que decía, entre otras cosas, lo siguiente: "Acogiéndonos a los principios fundamentales de la prensa: Informar y opinar con objetividad, independencia y serenidad, decidimos abstenernos de aceptar cualquier publicación que contenga insultos o agravios personales” y más adelante también afirmaba lo siguiente “Nuestra independencia nos compromete con la opinión pública seria, nos impone el deber de la más rigurosa objetividad...”

Lo allí publicado, parecía una declaración de voluntad del quehacer periodístico ético y responsable, veraz y oportuno.

Con indignación hemos atestiguado que la declaración de voluntad nada tiene que ver con la realidad comunicacional del medio de prensa que usted dirige; hemos leído en artículos por ustedes publicados, un sistemático ataque al Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela; a tal punto que el artículo publicado el domingo 12/12/04, página A4, por el cubano Carlos Alberto Montaner, titulado Chávez y el miedo, colmó nuestro nivel de tolerancia y paciencia. Este señor Montaner, oscuro personaje de origen cubano, llama “asesino selectivo” al Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, y defiende a los autores materiales, muertos en un enfrentamiento con un cuerpo policial venezolano, del acto terrorista donde murió el Fiscal Danilo Anderson.

Señora Presidenta, ejerciendo mi derecho a réplica pudiera contradecir cada línea de este artículo con argumentos de Hecho y de Derecho que expongan de una forma veraz lo que acontece en la República Bolivariana de Venezuela; sin embargo, este artículo no tiene asidero alguno, es un bodrio, por lo que está muy lejos de merecer nuestra respuesta.

Este artículo ofende la majestad del Presidente legítimo y Constitucional de un Estado de Derecho y Justicia Social, reconocido y admirado por la Comunidad Internacional; un Presidente que a pesar del sistemático, enfermizo y descabellado ataque de sus enemigos, (los opresores del Mundo y sus lacayos) ha demostrado con creces su compromiso con el Pueblo y, en repetidas ocasiones electorales ha recibido el apoyo mayoritario y avasallante de quienes creemos y participamos protagónicamente en una sociedad cuyo motor y fin es la Justicia.

El bodrio suscrito por Montaner, termina diciendo que el "16 de Agosto" hubo un fraude electoral; luego de equivocarse en la fecha, cuestiona al Centro Carter y la OEA por declarar una elección transparente, obviando además, por su desinformación estructural, que estas elecciones también fueron declaradas transparentes, confiables, imparciales, objetivas y perfectamente AUDITABLES por más de 35 Organismos Electorales de todo el Continente, más de 150 académicos de las más prestigiosas Universidades de Europa y América, más de 15 organizaciones expertas en Observación Electoral Internacional, e Institutos reconocidos internacionalmente en Derechos Humanos, entre otros, el Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH).

La movilización masiva del pueblo venezolano y las repetidas victorias electorales del Proceso Bolivariano, avalan internacionalmente esta Revolución. ¿Qué jefe de estado está dispuesto, como Chávez, a someterse a un referendo revocatorio? (Altercom)

Este último comentario lo hago a modo de información general, sólo como una muestra de los argumentos serios, éticos, veraces, ajustados a la realidad y al derecho que pudiéramos esgrimir frente a tan salvaje bodrio periodístico.

Señora, pudiera usted, si no ejerce los correctivos del caso, estar amparando y haciéndose cómplice de un visceral ataque sistemático a nuestra Soberana República y a nuestro legítimo Presidente.

Esperamos que en función de la ética periodística, el respeto al derecho de los pueblos a una información Veraz y Oportuna y del compromiso que ustedes dicen asumir en la nota publicada el 26 de Septiembre de 2004, adopten las medidas correspondientes a una situación que llegó a colmar los niveles de cordura y tolerancia de quienes ejercemos nuestro derecho a la veracidad y a la justicia en todos los aspectos de nuestra cotidianidad.

El Diario El Comercio, en su publicación permite una acusación grave e irresponsable al Presidente de mi país y, una terrible ofensa a un pueblo amigo que, construyendo su propio destino y en la continua realización de la justicia social, llora la muerte de un ilustre venezolano en manos de grupos que dirimen sus conflictos o inconformidades a través de la vía del terror y el crimen.

En nombre de este Noble Pueblo, del cual formo parte y me honro en representar como Embajador, que comparte el mismo dolor y la misma indignación ante estos maquiavélicos intentos de arrebatarnos nuestra soberanía y derechos y crear una matriz de opinión que justifique actuaciones terroristas, le invito una vez más a aplicar los correctivos indispensables en función del compromiso periodístico con el pueblo.

Oscar Navas Tortolero

Embajador de la República Bolivariana de Venezuela en Ecuador

Quito, 13 de diciembre de 2004