Arkipus es un grupo de jóvenes: Ramiro Ibadango, Yauri Muenala, Cristian Castillo, Andrés Cuatín, Marcelo Manosalvas y Freddy Galeano, miembros de la Unión de Artistas Populares del Ecuador (UNAPE) que vienen impulsando una serie de actividades artísticas, que comenzó en Imbabura, pero tiene proyecciones nacionales.

Los Kipus constituían una serie de cuerdas que con una disposición especial de nudos y colores servían a los Incas para llevar las cuentas, era, por lo tanto, un instrumento de comunicación; la idea de tener un grupo artístico (ART- KIPUS) que recoja aspectos ancestrales de la cultura, de sus tradiciones, de su historia, unió a estos jóvenes que ahora son reconocidos por las autoridades y vecinos como emprendedores, prácticos y muy empeñosos por difundir un pensamiento crítico de la realidad nacional, crear una identidad genuina y soberana, caminantes que luchan en contra del individualismo y el neo colonialismo cultural.

Los artistas del pueblo han tenido que superar diferentes obstáculos; primero, en sus propias casas, vencer la idea de que ser artistas no es rentable, y como no es rentable no tiene futuro. La iniciativa los llevó a buscar diferentes formas de financiamiento y auto financiamiento para realizar un proyecto que inició en febrero de este año, un proyecto que cumplió 4 facetas:


Realización de murales

El proyecto inició en Pimampiro, un cantón de la provincia de Imbabura. Para los lugareños era la primera vez que un movimiento de este tipo se instalaba a pintar un mural y así durante casi un mes observaban cómo los Arkipus, dejando de lado sus obligaciones (especialmente clases) se dedicaban con esmero para dejar plasmado en los muros un arte irreverente, con sentimiento ancestral. Incluso dormían en colchonetas durante este tiempo, pero nada absolutamente los alejó de su propósito.

Según Marcelo Manosalvas, esta experiencia fue muy motivante: “íbamos, regresábamos, pero prácticamente vivimos todo este tiempo ahí; conversábamos con la gente, los niños se acercaban a preguntar, conocimos a mucha gente; en general, fue una experiencia enriquecedora”.

Primer concurso de Cuerpos Pintados, tema: “Tradiciones imbabureñas”

El hombre es tierra, fuego, agua, aire, es pasado, presente y futuro, inevitablemente relacionado con el sol, la luna, el universo, con los animales y con todo lo que les rodea.

Es un universo creador e increado, es principio y fin, es el infinito, el todo de donde surgió la luz, es fuerza y amor, es la causa sin causa de donde proviene la vida.

Al inicio, vencer ese prejuicio de la gente de ver el arte en el cuerpo de una mujer desnuda fue difícil, muchos decían: ¡cómo el municipio puede apoyar a actos donde se promueva el morbo! Pero después de conversar con los vecinos y ver el desarrollo del evento, los visitantes lo calificaron como un éxito y quedaron satisfechos. Mari Cruz Navarro se llevó el primer lugar, pero ganaron todos los asistentes pues quedó de manifiesto la importancia de la expresión corporal, el aprecio y respeto por la vida humana.

Talleres artísticos vacacionales de manifestación cultural como pintura, dibujo, teatro, danza y deportes

El hombre de hoy vive en un constante ir y venir, en medio de afanes, pues así lo exige la sociedad, se han olvidado valores importantes como la unidad, el amor, la humildad. Las relaciones interpersonales, en la mayoría de los casos, funcionan por intereses egoístas, llegando a ser frívolas y vacías, las cuales no generan progreso alguno. Es por eso que Arkipus, con un grupo de más de 80 jóvenes, en talleres artísticos se esforzaron por reafirmar las tradiciones de su pueblo y motivar a mantenerlas como bandera de lucha de su identidad cultural.

“Realizar todo este proyecto fue un poco difícil, debimos autofinanciarlo en gran parte, aunque ya para realizar los talleres contamos con el apoyo del gobierno provincial que nos ayudó con la estadía y pasajes. Estos talleres superaron nuestras expectativas, pues tuvimos la colaboración de otros compañeros de la UNAPE para áreas como la danza, el teatro, etc.” manifestó Manosalvas.

Foro por una Asamblea digna y popular

¿Los artistas hablando de política? Esa fue la pregunta que les planteó el representante del Ministerio de Inclusión Social y Económica (MIES) cuando Arkipus fue en busca de ayuda para financiar la cuarta etapa de su proyecto artístico y cultural. Además, el mayor del grupo tiene 20 años, ¿qué nos pueden enseñar?, ¿qué nos pueden proponer para la Asamblea Nacional Constituyente?

Los jóvenes argumentaron que el arte corresponde a una forma de manifestación de los pueblos, que a través de la pintura, la escultura expresan su descontento con el olvido, con el atraso, con la explotación y discriminación. El artista no puede desvincularse del dolor y el sufrimiento ajeno, no puede desligarse del pueblo de donde nace y tiene la responsabilidad de usar su lenguaje para hacer una crítica de la realidad social.

Ante tal argumento las autoridades promovieron el evento, que tuvo mucha acogida y dejó en los participantes la idea de promover la corriente de cambios patrióticos, soberanos, que promuevan el respeto por la tierra, la naturaleza, de la cual somos parte, las reivindicaciones de las causas populares y la necesidad de vernos como seres humanos, con amor, humildad, dolor y no como mercancía, como un objeto para hacer crecer el capital transnacional.