El último acuerdo salarial venció el pasado 31 de diciembre y transcurridos más de seis meses, la empresa se niega a discutir una imprescindible recomposición salarial.

Cabe destacar que los ingresos de los trabajadores de prensa de ANSA tienen un atraso histórico que sumado al deterioro del poder adquisitivo del corriente año tornan insostenible la situación.