El portavoz de Ban Ki-moon, Martin Nesirky, declaró el lunes en una rueda de prensa que, según los informes publicados por los observadores de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la oposición armada siria disparó a inocentes civiles desde el interior de varias instalaciones hospitalarias.

Nesirky se ha referido también a la última reunión del Consejo de Seguridad de la ONU con el objetivo de resguardar a civiles e insistió en que todos los días eramos testigos de enfrentamientos brutales en distintas partes del mundo que acababan con la vida de muchos ciudadanos.

El alto cargo de la ONU, además hizo referencia a los pronunciamientos del secretario general de la ONU, y aseveró que Ban Ki-moon, quien cree que la matanza de civiles en cualquier parte del mundo como en Somalia, Congo, en Homs, Siria, como en el resto de lugares tiene que terminar.

El Gobierno de Bashar al-Asad aceptó el pasado 27 de marzo el plan de paz de seis puntos, presentado por el enviado especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, que establece el cese el fuego, el envío de ayuda humanitaria y el inicio de las negociaciones entre las partes implicadas en el conflicto.

Siria es víctima de la intervención de varias potencias occidentales y regionales, entre ellos Arabia Saudí, Catar y Turquía, países que suministran armamentos avanzados a grupos armados con la intención de organizar ataques contra el Gobierno de Damasco.

Los observadores de la ONU desplegados en Siria suspendieron su misión, el 16 de junio, un día después de que Robert Mood informase de que la intensificación de la violencia obstaculiza la labor de los monitores de la ONU en ese país árabe.

Fuente: HispanTV, 26/06/2012.