El Consejo Europeo, la instancia que reúne los jefes de Estado y/o de gobierno de los países ‎miembros de la Unión Europea, está tratando de instaurar un sistema de vigilancia de las ‎comunicaciones personales vía email. El “noble ideal” invocado para justificar lo que ‎en realidad sería una grave violación de las libertades individuales es la «lucha contra la ‎pedopornografía». ‎

El Consejo Europeo pretende imponer una diferenciación legal entre la correspondencia en papel ‎y los emails o correos electrónicos. La correspondencia tradicional en papel seguiría estando ‎regida por la Convención Postal Universal, que garantiza la confidencialidad de la ‎correspondencia, mientras que los correos electrónicos o emails serían todos escaneados y ‎sometidos a análisis para identificar ciertos mensajes. ‎

Ya en este momento, varios operadores –como Google Mail, el conocido Gmail– se han ‎pronunciado a favor de escanear todos los mensajes enviados por correo electrónico. ‎

Por su parte, la Comisión Europea, a través de la Comisaria europea Margrethe Vestager, ha ‎expresado inquietud ante ese proyecto, que viola las reglas europeas de e-Privacy, ‎principalmente las normas de la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea. ‎

Si el Consejo Europeo lograra imponer su sistema de vigilancia de los mensajes por correo ‎electrónico, la simple modificación de los criterios del filtro bastaría para utilizarlo con cualquier ‎objetivo. ‎

La Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos Internos del Parlamento Europeo ya aprobó ese ‎nuevo dispositivo, el 26 de mayo de 2021. ‎