El español Josep Borrell, Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y ‎Política de Seguridad, viajó discretamente a Ucrania a principios de enero. ‎

Durante su estancia en ese país, Josep Borrell estuvo en la línea del frente en Donbass y se reunió con ‎los funcionarios de la Misión de la Unión Europea para la Asistencia Fronteriza en Moldavia y ‎Ucrania (EUBAM) para instaurar un bloqueo económico contra Transnistria, oficialmente República Moldava Pridnestroviana, un‎ pequeño Estado ‎no reconocido cuya población decidió –por vía de referéndum– separarse de Moldavia después de ‎la desaparición de la URSS [1]. ‎

La Unión Europea, que se presenta oficialmente como una potencia «de paz», en realidad está ‎preparando los teatros de guerra para la OTAN. ‎

[1«En 1992, Estados Unidos trató de aplastar militarmente la Transnistria», por Thierry Meyssan, Red Voltaire, 17 de abril de 2010.