Buenos días. Buenos días a todos. Permítanme agradecerles por levantarse tan temprano. Hablábamos cuando entramos acerca de – ¿sintieron el temblor? Muy leve. Efectivamente muy leve. Como pueden ver, es realmente un placer para nosotros y les agradezco a todos el esfuerzo que han hecho para reunirse.

Una de las metas del presidente Obama y mía es profundizar nuestra relación con el Caribe. Sabemos la importancia que tiene cada uno de sus países en nuestros esfuerzos para forjar no sólo relaciones más estrechas, sino más prosperidad, más seguridad y mayor inclusión social. Espero con interés trabajar con todos ustedes. Esta mañana espero que podamos conversar acerca de la Iniciativa de Seguridad de Estados Unidos y la Cuenca del Caribe, del comercio y la recuperación económica, del cambio climático y la energía, y por supuesto, de nuestra nueva política hacia Cuba.

Nos acompañan hoy tres distinguidos congresistas. Los vi cuando entraban. Algunos de ustedes los conocen. Tenemos al congresista Eliot Engel y –(aplausos)– sí, bien, aplaudan, para que conste. Eso no sucede muy a menudo. Eliot y yo servimos juntos muy felizmente durante ocho años, y lo mismo también tuve el privilegio de hacerlo con mi amigo Gregory Meeks, quien ha viajado ampliamente por la región y tiene una abundancia de buenas ideas. También, Bill Delahunt de Massachusetts. Tenemos –(aplausos)– a Bill, quien realmente, trajo a su propios admiradores. Buena planificación buena para un fanático del equipo [de béisbol] Red Sox.

Sé que algunos de ustedes conocen a otros con quienes viajo hoy, el secretario de Estado adjunto Tom Shannon, quien ha venido trabajando muy arduamente en todos estos asuntos, especialmente el de la seguridad. Esta puede ser una cara nueva para ustedes: Dan Restrepo. Algunos quizás conozcan a Dan. Levante la mano, Dan, para que lo vean. Dan trabaja en la Casa Blanca, en el Consejo de Seguridad Nacional, en asuntos del Hemisferio Occidental. Y veamos quién más. Ah, Héctor Morales, nuestro embajador en la OEA, que ha trabajado muy arduamente con muchos de ustedes durante años, y especialmente en los preparativos para esta reunión.

Antes de pasar a los asuntos, quiero presentarles a alguien muy especial, la profesora Dinah Shelton, sentada aquí conmigo. Es la candidata de Estados Unidos para la elección a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Tiene credenciales superlativos. Espero que tengan ocasión de hablar con ella. Estoy entusiasmada por su candidatura. Espero que puedan apoyarla en la elección del jueves. Traerá experiencia en derecho consuetudinario a la comisión, lo cual pensamos que será muy valioso. Y por supuesto, es una mujer muy preparada, lo que creo que es muy importante. En mi humilde opinión, no ha habido suficientes mujeres en la comisión, así que espero hablar con ustedes acerca de ella y que la conozcan.

Permítame abordar brevemente algunos de estos asuntos antes de que le ceda la palabra a mi colega, y luego podremos charlar de manera informal. Con la Iniciativa de Seguridad de Estados Unidos y la Cuenca del Caribe, el presidente Obama ha hecho un compromiso de 45 millones de dólares. Esperamos que esto ayude realmente a nuestros amigos y vecinos caribeños. Queremos contribuir a resolver los desafíos comunes que afrontamos utilizando las herramientas de aplicación de la ley, del ejército y del desarrollo. El 20 de mayo hubo una reunión técnica en Surinam y los grupos de trabajo que surgieron de esa reunión actualmente sientan las bases de la reunión de seguimiento que se celebrará posteriormente este año en Estados Unidos.

Esto fue tema de muchas conversaciones en Trinidad y Tobago en la maravillosa cumbre que ustedes auspiciaron. Estoy ansiosa de escuchar sus ideas acerca de cómo podemos ayudarles. Fue lo más importante que oímos de los países caribeños, que están sujetos a la presión implacable de los narcotraficantes y las pandillas criminales. Y queremos que sepan que el presidente Obama está dispuesto a hacer todo lo que creamos que pueda ayudarles.

Segundo, quiero alentar mayor cooperación económica. Nuestras economías evidentemente están sumamente interconectadas. Sabemos que el comercio entre nuestros países puede ser una gran parte de nuestra recuperación económica. Espero que cada uno de sus gobiernos esté dispuesto a trabajar con el Representante de Comercio de Estados Unidos, Ron Kirk, excelente persona para el cargo, y a quien espero que puedan conocer, para convocar reuniones del consejo sobre comercio e inversión. Haremos hincapié especial [inaudible] en promover políticas comerciales equilibradas que mejoren las perspectivas para todos nuestros pueblos. Y uno de los problemas que suceden con el comercio es que poco ha llegado a las personas más marginadas y vulnerables, y tenemos que tratar de mejorar ese aspecto.

Tercero, como ya saben, sus países y la región sur de nuestro país son especialmente vulnerables tanto al cambio climático como a la fluctuación en los precios de la energía. Espero que podamos colaborar en la Asociación de Energía y Cambio Climático de las Américas que el presidente Obama anunció en la cumbre y hallar soluciones concretas. Estamos listos a ayudar con ideas de inversión, ideas de tecnología y enfoques de energía limpia, como lo hacen otros países en el hemisferio, en particular Brasil. Queremos trabajar juntos para resolver este problema.

Por último, quiero recalcar que Estados Unidos bajo la administración del presidente Obama está adoptando un enfoque totalmente nuevo con respecto a nuestra política hacia Cuba. Hemos disminuido las restricciones a los viajes y las remesas familiares. Mientras me preparaba en la habitación del hotel esta mañana, tenía la televisión encendida y en CNN vi la feliz reunión entre un hombre y su hijo pequeño, al que no había visto en año y medio debido a las anteriores restricciones de viaje. Hemos autorizado mayores enlaces de telecomunicaciones. Hemos anunciado la reanudación de las conversaciones sobre la inmigración bilateral y el correo directo.

Esperamos el día en que Cuba pueda ser parte de la OEA. Pero consideramos que la participación en la OEA ha de conllevar responsabilidades. Y nos debemos a nosotros mismos defender las normas de democracia y gobernabilidad que han traído tanto progreso a nuestro hemisferio. No se trata de revivir el pasado, sino que se trata del futuro y de ser fiel a los principios fundadores de esta organización. Sé que hemos tenido algunas conversaciones sobre esto. Espero que tengamos más. Los países caribeños han desempeñado una función clave, una función constructiva en esos diálogos, y estoy segura de que podemos proponer una manera común hacia adelante.

Me interesa sobremanera forjar esta relación.