El presidente iraní Hassan Rohani mencionó, el 3 de julio de 2018, la posibilidad de cerrar el estrecho de Ormuz ante la aplicación de sanciones unilaterales de Estados Unidos contra la República Islámica de Irán. «O el mundo puede utilizar el estrecho o nadie puede hacerlo», declaró Rohani.

El 5 de julio, el comandante en jefe de los Guardianes de la Revolución, Mohammad Alí Jafari, expresó su disposición a cerrar el estrecho de Ormuz.

Las sanciones unilaterales de Estados Unidos contra Irán en sectores como la compra y venta de metales, la moneda, la deuda y la producción de vehículos automotores deben entrar en vigor el 7 de agosto. Las sanciones estadounidenses contra el sector bancario y la industria del petróleo serán aplicables a partir del 5 de noviembre.

Irán ya se había planteado la posibilidad de cerrar el estrecho de Ormuz en 2012 y hoy lo hace nuevamente ante el fracaso de las negociaciones que el presidente Rohani acaba de realizar con los europeos, que se oponen a la salida de Estados Unidos del acuerdo con Irán, conocido como 5+1 o JCPOA.

Al menos la tercera parte del tráfico mundial de hidrocarburos pasa por el estrecho de Ormuz.

Bajo la administración de George W. Bush, el Pentágono mantenía permanentemente 2 portaviones en el Golfo Pérsico. La Quinta Flota estadounidense, con base en Bahréin, está a cargo de garantizar la libre circulación marítima en esa región en aplicación de la «doctrina Carter», que clasificó el acceso de Estados Unidos a los hidrocarburos del Golfo Pérsico como una cuestión de seguridad nacional.

El vocero del US CentCom [1] confirmó a la agencia Reuters que el Pentágono está tomando disposiciones al respecto.

[1El US CentCom (United States Central Command) es el mando militar estadounidense a cargo de las fuerzas y operaciones militares de Estados Unidos en toda la región del Medio Oriente, incluyendo el Golfo Pérsico. Nota de la Red Voltaire.