La Cámara de Representantes estadounidense adoptó una resolución que expone la posición de ‎Estados Unidos ante el genocidio turco contra los armenios (H.Res.296 Affirming the ‎United States record on the Armenian Genocide).‎

Ese texto no apunta a establecer una verdad histórica, a designar culpables y mucho menos a ‎abrir el camino al pago de reparaciones. Se trata de una moción política cuyo principal objetivo es ‎solo afirmar que Estados Unidos se opuso –en el momento de los hechos– al genocidio que se perpetraba contra los armenios y que hoy ‎se separa del actual negacionismo turco. ‎

El representante que presentó la moción aprobada, Adam Schiff (demócrata por California), ya ‎había presentado en 2007 una versión diferente de ese texto, que no fue aprobada debido a una ‎serie de amenazas de Ankara. Pero en el actual contexto de la intervención militar turca contra ‎los grupos armados kurdos en el noreste de Siria, el representante Schiff obtuvo el respaldo de ‎otros 141 representantes para presentar la nueva versión, adoptada este 29 de ‎octubre con 405 votos a favor y sólo 11 votos en contra. ‎

Dado el contexto político actual ya mencionado, no es sorprendente ver que la resolución aprobada ‎pasa por alto el papel activo que desempeñaron los kurdos como instrumento de Turquía en la ‎masacre contra los armenios, en cuyas tierras se establecieron de inmediato los kurdos que ‎habían participado en la masacre. ‎

Un texto idéntico al ya aprobado en la Cámara de Representantes fue presentado en el Senado ‎por el también demócrata Bob Menéndez bajo el intitulado S.Res.150 - A resolution expressing ‎the sense of the Senate that it is the policy of the United States to commemorate the Armenian ‎Genocide through official recognition and remembrance.‎