Documentos oficiales desclasificados a principios de 2020 por los Archivos Nacionales del Reino ‎Unido demuestran que, desde 1945 hasta 1977, los sucesivos gobiernos británicos ‎subvencionaron en secreto la agencia de noticias Reuters y la BBC para difundir fake news ‎contra los simpatizantes del comunismo y contra la URSS. ‎

Durante la guerra fría, el Foreign Office (ministerio británico de Exteriores) creó el Information ‎Research Department (IRD), cuya misión consistía en identificar y desacreditar a los simpatizantes ‎de la URSS. También creó la Globe News Agency y la Near and Far East News Ltd. (NAFEN) ‎en Estambul y Nueva Delhi, así como la Star News Agency en Karachi y la Arab News Agency en ‎El Cairo y en Beirut a partir de 1956. Entre las numerosas personalidades que participaron ‎activamente en ese programa de desinformación instaurado por el gobierno de Su Majestad ‎estuvieron George Orwell, Arthur Koestler, A.J.P. Taylor y Bertrand Russell.‎

El Information Research Department o IRD influyó sobre la opinión pública británica para que ‎esta se inclinara a favor de la incorporación del Reino Unido a la Comunidad Económica Europea –‎antecesora de la actual Unión Europea– a través de la European League for
Economic Cooperation (ELEC), equivalente británico del American Committee on United Europe ‎‎ [1].‎

El Information Research Department o IRD fue disuelto en 1977 por el entonces ministro ‎de Exteriores, David Owen, para poner fin a las operaciones de propaganda contra el ala izquierda del Partido ‎Laborista. ‎

Por supuesto, todo lo anterior y muchos otros elementos se conocían desde hace mucho tiempo ‎‎ [2], pero los documentos que acaban de ser ‎desclasificados son pruebas irrefutables de lo que ya se sabía.

Esos documentos demuestran que ‎durante más de 30 años, el MI6 y la CIA controlaron los flujos de información en todo el mundo occidental y el Tercer Mundo, como denunció, ante la UNESCO en 1973, el político y ‎dirigente pacifistas irlandés Sean McBride. ‎

Estos documentos británicos desclasificados deben estar vinculados a las revelaciones de la ‎Comisión Chilcot sobre la manipulación de la opinión pública en relación con la invasión ‎contra Irak –en 2003– y con las revelaciones que nosotros mismos hemos emitido, desde este sitio web, ‎sobre el actual dispositivo de propaganda del ministerio británico de Exteriores –Innovative ‎Communications & Strategies (InCoStrat). Desde 2014, esta agencia, con base en Estambul, ha ‎venido inventando una narrativa falsa sobre la guerra en Siria, versión que impuso al conjunto de ‎la prensa internacional. ‎

La agencia de prensa Reuters, vendida en 2008 a Thomson Financial en 2008, no parece ‎depender actualmente del MI6 británico sino de la CIA estadounidense, tiene acceso permanente ‎al puesto de mando del Pentágono y puede así divulgar todas las fakes news necesarias en el ‎momento adecuado. ‎

Estas revelaciones nos demuestran que es simplemente estúpido creer que sólo los regímenes ‎llamados «autoritarios» tratan de engañar a su propia población con información falsa o ‎deliberadamente manipulada. Las llamadas «democracias» actúan de la misma manera. ‎

Para más información sobre ese tema, ver en Red Voltaire los artículos:‎
 «Para Londres, la propaganda de guerra es un arte», por Thierry Meyssan, 23 de ‎agosto de 2016.‎
 «Las técnicas de la propaganda militar moderna», por Thierry ‎Meyssan, 16 de mayo de 2016.‎
 «Propaganda y postverdad», por Thierry Meyssan, 5 de noviembre ‎de 2019.

[1Ver «Historia secreta de la Unión Europea», por Thierry Meyssan, ‎‎Red Voltaire, 16 de enero de 2005.

[2IRD. Origins and Establishment of the Foreign Office Information Research Department, 1946-‎‎48, Historians LRD, History Notes #9, agosto de 1995; Britain’s secret propaganda war, ‎Paul Lashmar y James Oliver, Sutton Publishing, 1998.