Y me lo dijo aquí en La Habana: Que era más factible un cambio de política por parte de Estados Unidos hacia Cuba bajo una administración Republicana que con un gobierno de un Presidente Demócrata. La conversación fue casual en la cafetería del Hotel Nacional de La Habana. Tomábamos un aromático café cubano, cuando un importante cineasta de Hollywood que asiste al Festival del Nuevo Cine Latinoamericano, a quien conocíamos de un Festival anterior, nos presentó a un importante legislador californiano que coincidentalmente vino a Cuba formando parte de una amplia delegación de oficiales electos del Estado de California que incluye alcaldes, concejales y legisladores tanto de la Cámara como del Senado Estatal.

No vamos a mencionar por su nombre a este político norteamericano porque la conversación fue de carácter privado y no sería correcto que reveláramos su identidad sin su previa autorización. Diremos el "milagro pero no el Santo".

Porque lo importante no es quien lo dice sino lo que dice este hombre público norteamericano de California, que dicho sea de paso está muy lejos del llamado pensamiento liberal. Para decirlo claro. El Hombre es un conservador de pura cepa defensor a ultranza del sistema capitalista de su país y nada tiene de simpatizante de la izquierda y mucho menos del gobierno revolucionario cubano.

Diríamos que sus argumentos tienen mas que ver con el pragmatismo que con la ideología. El razonamiento que nos hizo de por qué el gobierno Republicano del Presidente Bush puede cambiar la política de Embargo hacia Cuba mas fácilmente que una administración Demócrata se basa en argumentos convincentes.

A los Republicanos -nos expresa el legislador- se les tiene como enemigos jurados de los comunistas de manera que a nadie se le va a ocurrir acusarlos, como ocurre con los Demócratas que son "soft on communism" es decir "flojos en comunismo" o cosas por el estilo. Nuestro interlocutor apunta- para reforzar su punto de vista- que no fue un Presidente Demócrata sino un Republicano, un anti-comunista de reconocida historia, el Presidente Richard Nixon, quien le abrió las puertas a China y estableció plenas relaciones diplomáticas con el régimen de Pekín, precisamente cuando estaba todavía Mao Tsé Tung en el pleno ejercicio de su poder, que eran tiempos de dureza y pureza ideológica del sistema.

Con Viet-Nam la historia no es muy distinta. La guerra terminó precisamente bajo el mandato del propio Presidente Nixon y fue su Secretario de Estado Henry Kissinger, el mismo que reaparece ahora en un importante cargo de la administración Bush - el que fuera instrumentador de una diplomacia práctica que dejaba a un lado los infecundos orgullos imperiales para resolver aquel conflicto que no se podía ganar por los Estados Unidos con una guerra prolongada y distante que desangraba a la nación y que no contaba con la aprobación de la opinión pública norteamericana.

"Nuestro país -apunta nuestro interlocutor- es la nación militarmente más poderosa de la tierra y no estamos ya en tiempos de la "guerra fría" cuando la otra potencia, en aquel caso la Unión Soviética, pudiera utilizar a un territorio cercano como el de Cuba para buscar un equilibrio de poderes y reproducir situaciones como la ocurrida cuando la llamada "Crisis de Octubre de 1962". De manera que no hay razón para pensar en amenazas a 90 millas de nuestro territorio".

"Por mas de 40 años - añade el norteamericano - hemos mantenido una política de hostilidad hacia Cuba. El Embargo, como la Ley Helms-Burton o su similar Ley Torricelli han afectado profundamente a Cuba en cuanto a problemas económicos para ese país, pero no ha dado resultados prácticos si lo que se pretendía con tales legislaciones era cambiar el sistema cubano. En otras palabras, si lo que se quería era acabar con Fidel Castro, lo que hemos hecho es afianzarlo mas en el poder ganándole el respaldo del pueblo cubano ante la evidente agresión de nuestra parte.

¿Somos o no somos capitalistas? ¿ No tenemos relaciones y comercio con China y con Viet -Nam que son países comunistas? ¿ Por qué no con Cuba? ¿Porque la derecha cubana de Miami nos impone una política absurda que afecta nuestros intereses como nación?

El visitante para cerrar su argumentación nos dijo al final de nuestra conversación."Le voy a hacer una predicción. Si acabamos con la prohibición de que nosotros los norteamericanos no podemos viajar a Cuba sin restricciones, el Embargo se va completo por el caño del inodoro".

En eso sonó el cañonazo de las nueve y nuestro americano dio un salto de susto en su asiento y nos dijo: " Es que yo estuve en la guerra y cada vez que escucho un disparo pienso en los muertos. Es por eso que quiero con Cuba la paz".