Fotografía oficial de todos los mandatarios participando en la cumbre de Guadajara, México
Foto ALCUE Org.

En la semana transcurrida antes de la Cumbre de la Unión Europea con los gobiernos Latinoamericanos-Caribeños, en la ciudad de Guadalajara, se dieron una serie de acontecimientos que son reveladores de la escasa capacidad de gobiernos del Tercer Mundo, del cual forma parte México, a enfrentarse a las complejidades del momento.

La predisposición del gobierno de Vicente Fox a permeabilizar los intereses norteamericanos mientras otros países del área latinoamericana cuentan con Europa para diversificar mercados y promover la multilateralidad de los organismos internacionales demuestra que el consenso entre los Estados latinoamericanos no existe y por lo tanto no podía manifestarse en la cumbre de Guadalajara.

El primero de ellos fue el estallido de tres petardos ruidosos en sucursales pertenecientes a los bancos Bancomer-BBVA, Banamex-Citigroup y Santander, en Cuernavaca, capital del sureño Estado de Morelos el 23 de mayo, colocados por un grupo del autodenominado Comando Jaramillista Morelense, del cual no existen antecedentes ni conocimiento entre los campesinos morelenses que fueron partidarios del líder zapatista Rubén Jaramillo. Este agrarista fue asesinado cuando gobernaba a México Adolfo López Mateos (1958- 1964), a quien se le ha atribuido la orden de la ejecución.

Esta manifestación de violencia tiene lugar en medio de una crisis que sufre el gobierno actual del Estado de Morelos, al que se acusa de vínculos con el narcotráfico. El gobierno de Morelos es administrado por el PAN, la formación a la que pertenece también el presidente Vicente Fox, quien a toda costa quiere poner a salvo al gobierno local de la condena pública.

El análisis de los hechos que prevalece entre los mexicanos tiende a presumir que los petardos son una diversión para convertir a los panistas en los héroes del momento por sus constantes declaraciones en contra de la violencia a la vez que minimizan los estallidos.

La cumbre sería, en efecto, un buen marco para que el PAN consolide su relación con el gobierno de Bush, por medio de esta mascarada, y siga respaldando la predilección de éste por el terrorismo y la seguridad, asediada por peligros ficticios. Para el gobierno mexicano ésta es la mejor estrategia a seguir para recibir el apoyo comercial de Bush frente a la competencia presentada por China.

El segundo acontecimiento de importancia, dentro del marco del comienzo de la cumbre de Guadalajara, capital del Estado de Jalisco, ha sido la declaración publicada en la prensa nacional, de acuerdo con la cual en la frontera sur de México pasan al territorio nacional 100 mil personas sobre todo originarias de América Central con sus papeles en regla, pero más de 190 mil migrantes que también cruzan la frontera son ilegales.

Esta declaración del Instituto Nacional de Migración, dependiente de la secretaría de Gobernación (Interior), cuya comisionada Magdalena Carral ha centrado el fuego sobre la necesidad de adoptar nuevos mecanismos de control de la ilegalidad. Esta aparente declaración patriótica se refiere a experiencias vividas en el medio migratorio adscrito en el Estado de Chiapas, cuyos funcionarios son altamente corruptos y carentes de la visión estratégica que reclama la situación geopolítica de la frontera sur mexicana.

En la frontera de Chiapas con Guatemala desde los años ochenta, tal como lo observara el coronel Alexandre de Marenches, quien fuera la figura estelar de la inteligencia exterior francesa en los albores de la V República, se dan cita una gran cantidad de conflictos que interfieren con la ordenada relación del norte con el sur del planeta. Allí se encuentran complejidades religiosas conviviendo con las mayores extravagancias delictivas.

Inauguración de la cumbre.
Foto Venpress.

Marenches recomendaba que se prestara atención especial a Chiapas. Se trata de un territorio que ha sido en los últimos años receptor del fenómeno delincuencial denominado Mara Salvatrucha, animado por la intención de posicionar a miles de delincuentes en la frontera sur mexicana como ocurre con los pandilleros denominados cholos en la frontera norte.

La Mara Salvatrucha comienza a ser vista como un proyecto de control y caos consolidado últimamente por el anterior subsecretario de asuntos Hemisféricos del Departamento de Estado norteamericano , Otto Reich. Este personaje está vinculado a la Iglesia de la Unificación del reverendo Sun Myung Moon, que ha jugado un especial papel en la operación Irán- Contra y ha sido instrumento del Stay Behind de la inteligencia anglosajona.

Para conocer la magnitud de los problemas delincuenciales y multirreligiosos, el Estado mexicano no cuenta con personal adecuado in situ para cuidar la frontera sur. Esto ocurre así porque a los funcionarios mexicanos sólo les atrae un atractivo del cargo migratorio: robar el dinero que los ilegales centroamericanos llevan consigo. La solución del conflicto norte sur que allí acrisola queda postergado.

El tercer acontecimiento que es definitorio en el momento mexicano actual está configurado con diversas tomas de posición de cara a los contenidos y la trascendencia de la propia reunión de Guadalajara. En la preparación del documento final que se firmará al término de la reunión que comienza mañana viernes, la Unión europea, según informó la prensa mexicana, se opuso a la insistencia de los latinoamericanos de incluir en el documento una condena a los abusos cometidos por los norteamericanos contra los prisioneros irakíes.

La prensa no mencionó a los que influían para la inclusión de la condena en la declaración final del encuentro que finalmente condenó la tortura sin mencionar a Estados Unidos. Es, sin embargo, necesario mencionar a tres países cuyos representantes en la cumbre tuvieron posiciones tan bien definidas, que es posible deducir de ellas motivos para no desear la condena a Estados Unidos.

El gobierno mexicano no está entre los que propusieron la condena porque el presidente Vicente Fox limita sus preocupaciones a la competencia insuperable que ofrece China y a los problemas de seguridad que postula y define el gobierno norteamericano para homogenizar al continente.

No se habría incluido tampoco el gobierno de Brasil porque el presidente Luiz Inacio Lula da Silva cree que la cumbre de Guadalajara puede ser un paso más para crear un orden mundial justo y democrático en que se combata eficazmente al hambre; por lo que la agenda, según el mandatario carioca, no debe contener temas de seguridad.

Tampoco pudo estar incluido el gobierno de Cuba porque Fidel Castro anunció el 26 de mayo, en un mensaje al pueblo mexicano, que no estará presente en Guadalajara porque la considera sin contenido y «porque no encuentra las mínimas condiciones para que su estancia en México produzca resultado constructivo alguno». La representación cubana quedó limitada a su canciller, quien jugó un papel de testigo cuando en la declaración final de la cumbre se expresó el rechazo al bloqueo comercial que padece la isla.

Finalmente, la posición crítica a Estados Unidos prevaleció bajo la forma de una aspiración general, de europeos y latinoamericanos, a restringir el unilateralismo anglosajón. Ello explica que en octubre próximo se inicien las negociaciones de un Acuerdo de Asociación de los países europeos con el Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay), mientras el Pacto andino y los centroamericanos comenzarán a estudiar la posibilidad de seguir el camino del Mercosur.

En el marco de la combinación de intereses latinoamericanos y europeos en América, Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay, es decir, el Mercosur completo, al que se suman Chile y Perú, dos países andinos, integrarán la primera fuerza expedicionaria latinoamericana que llegará a Haití como Fuerza Multinacional de Paz bajo el mandato de la ONU. La pacificación de Haití después de la grave crisis de febrero último cuando los marines derrocaron al gobierno de Jean-Bertrand Aristide.

El jefe del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero fue el representante europeo que realizó la gestión para crear esta fuerza multinacional, prometiendo que sería reforzada por un contingente español. Una especie de brigada Plus Ultra que no saldría de casa, vamos.

Los europeos y los latinoamericanos pidieron en la declaración final que la ONU sea reforzada como garante del multilateralismo como mejor fórmula para resolver las controversias internacionales. En este sentido la cumbre puede ser decisiva para la reconstrucción de Naciones Unidas, pues a través de su declaración final se expresan 58 países con más de mil millones de habitantes.