Tengo el honor de referirme a la carta de fecha 31 de mayo de 2018 que me envió la Presidenta del Consejo de Seguridad durante el mes de mayo con el fin de continuar el diálogo constructivo y colaborativo con Myanmar para encontrar una solución duradera a la situación humanitaria en el estado de Rakáin. He señalado la cuestión a la atención de los dirigentes del Gobierno de Myanmar, tal como se solicitó.

Me permito ahora mandarle la presente carta para informarle de los últimos acontecimientos y de las medidas concretas que ha adoptado el Gobierno de Myanmar en tres esferas específicas señaladas en la carta a la que me refiero, a saber: el acceso humanitario, la rendición de cuentas por las presuntas violaciones de los derechos humanos y la aplicación de las recomendaciones de la Comisión Asesora sobre el Estado de Rakáin.

Acceso humanitario

Con respecto al acceso de la ayuda humanitaria, se ha puesto en marcha el Mecanismo del Programa de la Unión para la Asistencia Humanitaria, el Reasentamiento y el Desarrollo en Rakáin a fin de proporcionar asistencia humanitaria a todas las comunidades necesitadas y coordinar dicha asistencia. El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, que incluye el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Sociedad de la Cruz Roja de Myanmar, el Centro de Coordinación de la Asistencia Humanitaria de la Asociación de Naciones de Asia Sudoriental destinada a la Gestión de Desastres, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y el Programa Mundial de Alimentos prestan asistencia humanitaria en el estado de Rakáin. Los países de la región y otros benefactores también ayudan a la población afectada a través del Mecanismo del Programa de la Unión para la Asistencia Humanitaria, el Reasentamiento y el Desarrollo en Rakáin. El CICR y el Movimiento de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja están duplicando la distribución de raciones de alimentos antes de que empiece la estación de lluvias, tienen en funcionamiento dispensarios de salud móvil y están repartiendo equipos de asistencia de emergencia.

Además, las actividades que llevan a cabo los organismos pertinentes de las Naciones Unidas y las organizaciones internacionales en el estado de Rakáin, incluidos sus viajes en el estado, cuentan con la facilitación del Comité de Coordinación de Rakáin, conforme a lo dispuesto en los memorandos de entendimiento respectivos concertados con los ministerios competentes.

Un avance importante es la firma de un memorando de entendimiento entre el Gobierno de Myanmar y dos organismos de las Naciones Unidas (la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) el 6 de junio de 2018, que ha abierto el camino no solo para prestar asistencia en distintas etapas del regreso y el reasentamiento en el proceso de repatriación, sino también para mejorar la asistencia humanitaria y las oportunidades de subsistencia para los repatriados, así como para todas las comunidades del estado de Rakáin. El memorando de entendimiento tripartito establece un marco de cooperación para ayudar a Myanmar a crear las condiciones propicias para el regreso voluntario, seguro y digno de los desplazados y promover una recuperación y un desarrollo basados en la resiliencia en beneficio de todas las comunidades del estado de Rakáin.

Rendición de cuentas

En relación con la rendición de cuentas, el Gobierno de Myanmar ha declarado en repetidas ocasiones que no aceptará ninguna violación de los derechos humanos y que tomará medidas contra los autores conforme a la ley, siempre que las acusaciones están respaldadas por pruebas suficientes. En algunos casos, como el incidente de la aldea de Inn Din, los autores, entre los que había miembros de las fuerzas de seguridad, ya han sido llevados ante la justicia. La reciente revelación de la matanza de 99 personas inocentes de etnia hindú cometida por el Ejército de Salvación Rohinyá de Arakan el mismo día en que atacó 30 puestos avanzados de policía ha desenmascarado el verdadero rostro de ese Ejército, que también debe rendir cuentas y no quedar impune.

La crisis actual en Rakáin se desencadenó por los atentados cometidos sin provocación por terroristas del Ejército de Salvación Rohinyá de Arakan, y afecta no solo a la comunidad musulmana, sino también a los hindúes y otras minorías étnicas. Tenemos que proteger los derechos humanos de todas las comunidades y garantizar la seguridad no solo de los musulmanes y rakaines, sino también de los hindúes y otras comunidades. La actual ronda de violencia en el estado de Rakáin ha pasado rápidamente de ser una tensión entre comunidades a constituir un problema de terrorismo que amenaza la seguridad nacional y la soberanía de Myanmar.

Otra importante medida fue el anuncio el 31 de mayo de 2018 por parte de la Oficina del Presidente de la decisión del Gobierno de crear una comisión de investigación independiente en el marco de su iniciativa nacional para promover la reconciliación, la paz y la estabilidad y el desarrollo en el estado de Rakáin. La comisión investigará las presuntas violaciones de los derechos humanos y las cuestiones conexas surgidas como consecuencia de los ataques terroristas perpetrados por el Ejército de Salvación Rohinyá de Arakan. El Gobierno está seleccionando a candidatos para la comisión, que estará integrada por personalidades nacionales e internacionales que recibirán asistencia de expertos. El Gobierno está totalmente decidido a adoptar medidas legales en respuesta a todas las violaciones cometidas en el territorio de Myanmar.

Recomendaciones de la Comisión Asesora sobre el Estado de Rakáin

La Comisión Asesora sobre el Estado de Rakáin fue creada por el Gobierno de Myanmar por iniciativa propia para buscar una solución duradera a los complejos desafíos en el estado de Rakáin, incluso antes de que el Ejército de Salvación Rohinyá de Arakan cometiera los primeros atentados el 9 de octubre de 2016. El Gobierno formuló una declaración el 24 de agosto de 2017 en la que acogió con beneplácito el informe final de la Comisión y se comprometió a aplicar sus recomendaciones en la mayor medida posible, en función de la situación sobre el terreno. Se asignó a un comité de nivel ministerial la responsabilidad de aplicar las recomendaciones de la Comisión Asesora, y se estableció una junta consultiva integrada por destacados miembros internacionales para que prestara asistencia a dicho comité. El comité ha publicado informes trimestrales sobre los progresos y ya ha aplicado más de 50 recomendaciones de un total de 88 y ha empezado a implementar unas 30 más.

La junta asesora del comité también ha emitido sus primeras opiniones con el objetivo de facilitar la aplicación efectiva de las recomendaciones. Algunas de las principales recomendaciones de la Junta, como el establecimiento de una comisión de investigación independiente y la solicitud de asistencia a organismos de las Naciones Unidas para aplicar el acuerdo de repatriación entre Myanmar y Bangladesh, ya se han llevado a la práctica.

Progresos del proceso de repatriación

Compartimos su preocupación por el sufrimiento de las personas desplazadas que han padecido explotación como consecuencia de la estrategia perniciosa y despiadada del grupo terrorista Ejército de Salvación Rohinyá de Arakan. El presunto número de desplazados que huyeron a Bangladesh está muy sobrestimado, ya que la cifra real no puede exceder el medio millón. Myanmar ha hecho todo lo posible por crear un entorno propicio para el pronto regreso de los desplazados, de conformidad con el acuerdo sobre el regreso de las personas desplazadas del estado de Rakáin, firmado el 23 de noviembre de 2017 por Myanmar y Bangladesh. A fin de acelerar la repatriación, en enero de 2018 se entregó a la parte de Bangladesh una lista de 1.222 personas que se había verificado que eran residentes de Myanmar y entre las que había hindúes y musulmanes.

Al 22 de junio de 2018, Myanmar había entregado a Bangladesh a un total de 1.788 personas que se había verificado que eran residentes de Myanmar y que figuraban en la lista que presentó Bangladesh en enero de 2018, que incluía a un total de 8.032 personas. Sin embargo, hasta la fecha Bangladesh no ha entregado ni a un solo repatriado. Por lo tanto, quisiéramos solicitar el apoyo del Consejo de Seguridad para instar a Bangladesh a que comience a aplicar el acuerdo bilateral y permita que las personas desplazadas que hayan sido verificadas puedan regresar sin demora, según lo convenido bilateralmente en el acuerdo sobre el regreso de las personas desplazadas del estado de Rakáin.

El pasado mes de mayo, 62 desplazados regresaron de sus campamentos en Cox’s Bazaar por voluntad propia. Tras pasar por el proceso obligatorio de verificación en el centro de recepción de Nga Khu Ya, fueron transportados al centro de tránsito de Hla Phoe Khaung. El Ministro de Bienestar Social, Socorro y Reasentamiento visitó a los repatriados en Hla Phoe Khaung, les explicó el proceso de reasentamiento y verificación nacional y les ofreció la ayuda y la asistencia necesarias.

El 11 de junio de 2018, un bote destrozado con 104 desplazados de Cox’s Bazaar a bordo quedó varado en la costa del municipio de Yathedaung. Las personas procedentes de los campamentos de Cox’s Bazaar quedaron alojadas en el centro de tránsito y se les proporcionó asistencia humanitaria. Con el objetivo de agilizar el proceso de repatriación, quisiera subrayar la necesidad urgente de que se difunda lo más ampliamente posible la información sobre el proceso de repatriación entre los desplazados en Bangladesh y de que se utilice el formulario convenido para recopilar información sobre los posibles repatriados.

La amenaza del Ejército de Salvación Rohinyá de Arakan para la seguridad nacional

También quisiera aprovechar esta oportunidad para destacar las repercusiones en la seguridad que tiene el proceso de aplicación del acuerdo bilateral entre Myanmar y Bangladesh sobre el regreso voluntario, seguro y digno. Como bien sabe, los múltiples atentados premeditados sin que mediara provocación contra los puestos avanzados de policía que se cometieron el 25 de agosto de 2017 son la causa fundamental de la actual crisis humanitaria en el estado de Rakáin. La amenaza de los terroristas del Ejército de Salvación Rohinyá de Arakan sigue siendo real y estando presente. Los terroristas siguen intimidando y matando a quienes defienden el regreso de los desplazados. Para garantizar la seguridad de todas las comunidades en el estado de Rakáin, es necesario y urgente que Bangladesh y otros interesados cooperen estrechamente para prevenir y evitar las amenazas del Ejército de Salvación Rohinyá de Arakan.

Defendemos la solución bilateral al problema humanitario que afecta a los dos países, en un espíritu de respeto mutuo, sinceridad y buena vecindad. Es absolutamente necesario fomentar la confianza entre Myanmar y Bangladesh para alcanzar nuestro objetivo común de dar una solución pacífica a este problema. Debemos evitar todo acto de provocación que pueda causar malentendidos, exacerbar las tensiones y menoscabar la aplicación del proceso de repatriación.

A este respecto, deseo señalar a su atención el hecho de que Bangladesh ha construido refugios de superficie en su lado de la frontera entre los mojones 34 y 35, lo que contraviene el tratado de demarcación de la frontera, de 12 de noviembre de 1998, que prohíbe la construcción de cualquier estructura en una distancia de 45,72 metros desde la línea fronteriza. Reiteramos nuestro llamamiento a Bangladesh para que elimine esas estructuras en cumplimiento del tratado de fronteras y disipe los malentendidos entre los dos países.

Cooperación con la Enviada Especial del Secretario General sobre Myanmar

La cooperación con las Naciones Unidas es uno de los principios de la política exterior de Myanmar. La Consejera de Estado formuló una declaración el 1 de mayo de 2018, tras la visita de los miembros del Consejo de Seguridad a Myanmar, en la que reiteró el compromiso del Gobierno de trabajar en colaboración con las Naciones Unidas para hacer frente a los numerosos y graves desafíos a que se enfrenta el país. En este espíritu, el Gobierno de Myanmar facilitó la primera visita oficial de la Enviada Especial del Secretario General sobre Myanmar, Christine Burgener, del 12 al 21 de junio de 2018. Myanmar ha aceptado la propuesta de apertura de la oficina de la Enviada Especial en Nay Pyi Taw y la ha invitado a participar en la próxima Conferencia de Paz de la Unión. Myanmar espera mantener una relación constructiva y fructífera con la Enviada Especial en nuestros esfuerzos por profundizar la alianza con las Naciones Unidas para hacer frente a los complejos desafíos que afronta el país.

Myanmar, que hace frente a los desafíos inherentes a completar su transformación en un Estado democrático que funcione plenamente, agradece la comprensión y el apoyo de la comunidad internacional.

En sus esfuerzos por lograr la reconciliación nacional y la paz, la democracia y el desarrollo, el Gobierno de Myanmar está dispuesto a colaborar de manera constructiva con las Naciones Unidas. Creo que las Naciones Unidas pueden ayudar a Myanmar a encontrar una solución amplia y duradera a este problema humanitario.

Le agradecería que tuviera a bien hacer distribuir la presente carta a los miembros del Consejo de Seguridad como documento del Consejo.