La estabilidad del mercado petrolero mundial sólo puede existir sobre la base de una justa negociación entre todos sus actores y el respeto por los derechos soberanos de cada uno de ellos: los dueños de los recursos petroleros, los gobiernos de los países consumidores y los inversionistas privados", puntualizó Alí Rodríguez Araque, presidente de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), durante su participación en el Seminario Internacional de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), en Viena, capital austríaca.

Venezuela y Pdvsa, dijo, representan un caso extremo y excepcional cuando se trata de abordar las relaciones entre la empresa nacional y el gobierno, y destacó lecciones aprendidas dentro de la Corporación, el país y también de utilidad para el mercado internacional, especialmente en lo atinente a la seguridad energética.

"Podemos tener diferentes opiniones acerca de los términos de la negociación, no sólo entre los gobiernos sino también al interior de cada uno de los actores, pero lo que está absolutamente claro es que todos tenemos que superar el colonialismo del pasado y reconocer el derecho a la gerencia soberana de los recursos naturales de los países exportadores, aunque estos sean pequeños y débiles. "Esta lección debe ser aprendida por los países consumidores y sus organizaciones", dijo.
Refiriéndose al aprendizaje interno, Rodríguez aseveró que "durante muchos años, la Corporación y el país vivieron dramáticas y erradas situaciones, hasta que se produjo la más infame confrontación del liderazgo tradicional contra el gobierno. En abril de 2002, ese liderazgo promovió un golpe de Estado contra el gobierno del Presidente Hugo Chávez, electo democráticamente. Luego, en diciembre 2002 y enero 2003, promovió un golpe económico, que llevó las exportaciones de petróleo a cero durante unas pocas semanas. Afortunadamente, ambos intentos fracasaron".

El presidente de Pdvsa remarcó que "el nuevo liderazgo representado por el Presidente Hugo Chávez Frías puso fin a este sinsentido antinacionalista. La nueva Ley Orgánica de Hidrocarburos, que entró en vigencia en el 2002, y las políticas de Venezuela en línea con las decisiones de la OPEP, promoviendo precios justos para consumidores y productores así como la estabilidad del mercado y la seguridad energética del futuro, son muestras claras de la lucha por el respeto y la soberanía de los recursos. La nueva Pdvsa, comprometida con el pueblo venezolano y el mercado mundial, es otro ejemplo de valorización de los recursos y su uso como palanca de desarrollo sustentable y mejor calidad de vida".

Además, Rodríguez recordó que el liderazgo tradicional venezolano perdió de vista el hecho de que los recursos petroleros no son propiedad de la empresa, aún cuando sea una empresa del Estado, sino que son del pueblo de Venezuela, quienes dependen de ellos. "Esta absurda posición fue tal vez el factor más importante que contribuyó a la desastrosa y prolongada caída de los precios del petróleo en 1998. Esta situación cambió radicalmente cuando emergió un nuevo liderazgo político, suficientemente fuerte para obligar a Pdvsa a cumplir las cuotas acordadas soberanamente entre Venezuela y sus homólogos de la OPEP".

Publicado en Revista Quantum N.32