Más de un centenar de personas participaron en la mesa sobre esta temática, una de las seis que se instalaron en la sede de la Universidad Bolivariana, sede Maracaibo, para debatir desde las bases los pormenores de la Carta Social que deberá ser aprobada por la organización de Estados Americanos.

Conscientes de que la pobreza tiende a surtir efectos desproporcionadamente graves en las poblaciones indígenas de América, que suelen ser los grupos más excluidos entre los pobres, los más vulnerables y los más desposeídos de la sociedad, los participantes de la mesa sumaron una serie de propuestas que, sumadas a las que se recogerán en los dos próximos foros regionales en Valencia y Puerto Ordaz, serán incorporadas al proyecto venezolano de la Carta.

Las propuestas abordaron el reconocimiento a la diversidad en todas sus expresiones y en todos los países. La historia que se conoce actualmente sobre el “descubrimiento” de América fue duramente criticada y los participantes del taller solicitaron que sea reescrita, mencionando las verdaderas palabras que dijeron los indígenas al observar a los españoles en las costas, y llevando esa información a la educación de los niños en las escuelas para corregir los conocimientos errados en las nuevas generaciones.

Se consideró prioritario que los historiadores corrijan la semántica discriminatoria que han utilizado hasta el momento y se recomendó ampliar los textos de historia universal, que termina en las páginas de Grecia y Roma y no contempla a las civilizaciones originarias de América.

Dentro de una serie de propuestas se deberán tener el cuenta el derecho de la práctica de la medicina tradicional indígena, a la libertad de culto, a la creación de un pasaporte indio, a la libertad de tránsito de los pueblos y naciones originarias entre las fronteras que interfieren en las zonas étnicas, y a tomar en cuenta la forma de vida y de subsistir de los pueblos indígenas frente a los proyectos energéticos y desarrollistas de los países.

Se solicitó, además, que los indígenas se incluyan en toda discusión sobre seguridad de Estado, junto a la inclusión de la educación intercultural bilingüe.

Que el derecho a la diversidad étnica vaya acompañado de la diversidad económica, fue otra de las propuestas presentadas en el foro, donde también se solicitó incluir en la Carta los derechos colectivos de los pueblos indígenas, que contemplen derecho al idioma, a la identidad, a la educación propia, al territorio y a la participación, de forma que puedan mantener la continuidad de la cultura así como también la determinación del destino y de sus prioridades.

También hubo activa participación por parte de estudiantes indígenas de la Universidad Bolivariana de Venezuela, sede Maracaibo, quienes sugirieron la realización de talleres y encuentros a nivel latinoamericano y caribeño para conocer las necesidades de cada comunidad indígena. Asimismo propusieron que se eduque al pueblo que no es indígena sobre la realidad indígena de sus países, para promover el conocimiento y respeto a las etnias.

Otra propuesta fue la necesidad de resaltar el derecho -y la necesidad- de crear medios de comunicación indígenas, en su idioma autóctono.