
Al intervenir en la videoconferencia dedicada a la reconstrucción de Siria, el 30 de junio de 2020, el primer ministro del Líbano, Hassan Diab, solicitó ayuda a la ONU y a la Unión Europea ante la Ley César estadounidense.
La llamada Ley César (Caesar Syria Civilian Protection Act), que entró en vigor el 17 de junio, es una ley estadounidense supuestamente destinada a “castigar” al presidente sirio, Bachar al-Assad, quien ha cometido el delito de mantenerse en su cargo, después de ser electo democráticamente en 2014, y al cabo de años de amenazas, de bloqueo económico contra su país, de acusaciones falsas contra su persona y de guerras abiertas y encubiertas.
La Ley César extiende las sanciones estadounidenses decretadas contra Siria a toda persona o entidad que aporte algún tipo de ayuda a Siria. Sin embargo, mientras que Siria logra burlar esa ley negociando a través de los mercenarios kurdos del Pentágono, Líbano no tiene posibilidades de hacerlo y la población libanesa ya comienza a enfrentar graves problemas en materia de alimentación.
«Llamo las Naciones Unidas, la Unión Europea y los países amigos a proteger el Líbano de las consecuencias negativas de toda sanción que se imponga a los sirios, en particular en el marco de la Ley César, y a velar por que esas consecuencias no perturben nuestras actividades comerciales y económicas en el extranjero, lo cual pone en peligro nuestros esfuerzos actuales por salir de la crisis que el país está atravesando», resaltó el primer ministro libanés.