El Consejo de la Unión Europea emitió una tibia condena sobre las actividades de prospección ‎de yacimientos de hidrocarburos que Turquía realiza ilegalmente en aguas territoriales de Chipre, tanto al oeste como al ‎noreste de la isla. ‎

En el comunicado emitido al respecto,

«El Consejo llama nuevamente a Turquía a abstenerse de ‎acciones de ese tipo, a actuar con un espíritu de buena vecindad y a respetar la soberanía y los ‎derechos soberanos de la República de Chipre, de conformidad con el derecho internacional».

Desde que Chipre se convirtió en miembro de la Unión Europea, el Consejo Europeo –integrado ‎por los jefes de Estado y/o de gobierno de los países miembros de la UE– se ha limitado siempre a ‎emitir este tipo de declaración, que invariablemente cae en saco roto ya que una parte ‎importante del territorio chipriota sigue bajo la ocupación militar ilegal del ejército turco que ‎además priva a una parte de la población chipriota de sus derechos en el seno de la Unión ‎Europea. ‎

Mientras tanto, la Unión Europea prosigue las negociaciones sobre una eventual adhesión de ‎Turquía, sigue subvencionando la economía turca –con vista a esa posible adhesión– y sigue ‎pagando a Ankara para que se encargue de los migrantes que pretenden llegar a Europa pasando ‎por territorio turco. ‎

Sin embargo, dado el contexto actualmente tenso entre Turquía y la OTAN, la Unión Europea ‎se atrevió esta vez a declarar que: ‎

«El Consejo (Europeo) decide suspender las negociaciones relativas al acuerdo global ‎sobre el transporte aéreo y acuerda no organizar» por el momento sesiones del Consejo ‎de Asociación ni otras reuniones en el marco de los diálogos de alto nivel entre la UE y ‎Turquía. El Consejo hace suya la proposición de la Comisión tendiente a reducir la ayuda ‎de preadhesión a favor de Turquía para 2020 e invita al Banco Europeo de Inversiones a ‎‎revisar sus actividades en materia de préstamos a Turquía, principalmente en ‎lo tocante a los préstamos vinculados a activos soberanos.»

En pocas palabras, el apoyo de la Unión Europea a Turquía podría disminuir en el futuro pero ‎ahora todo sigue igual, los derechos de los chipriotas siguen siendo pisoteados y ya ha ‎comenzado el robo de sus hidrocarburos. ‎