Las YPG (el grupo armado kurdo identificado como “Unidades de Defensa del Pueblo”) ‎se presentan como una organización siria vinculada al PKK (Partido de los Trabajadores del ‎Kurdistán, creado en Turquía, en 1978). Pero la mayoría de los dirigentes de las YPG no son sirios ‎sino turcos, lo cual hace pensar que son una ramificación del PKK en Siria. ‎

Durante la guerra fría, el PKK fue un partido de los kurdos de Turquía vinculado a la Unión ‎Soviética. Recurrió a la lucha armada contra la dictadura turca para obtener el reconocimiento de ‎la cultura del pueblo kurdo. Pero entró en decadencia a partir del encarcelamiento en Turquía de ‎su líder histórico, Abdullah Ocallan, en 1999. ‎

Según el general Ilker Basbug, ex jefe del estado mayor turco, Estados Unidos logró infiltrarse en ‎el PKK y trasladó su sede a Dinamarca. Desde entonces, el PKK cambió su ideología marxista-‎leninista por un anarquismo según el modelo delineado por el profesor estadounidense Murray ‎Bookchin. En 2005, la sede de este nuevo PKK volvió clandestinamente a Turquía. ‎

También cambió el modo de acción del PKK. De las acciones contra el Estado turco que realizaba ‎durante la guerra fría, derivó en el siglo XXI hacia el terrorismo puro con la realización de acciones ‎contra los civiles. ‎

Por su parte, las YPG fueron creadas por Estados Unidos en 2011, en el contexto de la agresión ‎externa contra Siria, para derrocar la República Árabe Siria. Desde su fundación, las YPG contaron ‎con el respaldo de Francia y Alemania para crear un Estado kurdo en suelo sirio, apoderándose de ‎tierras pobladas por asirios y árabes, conforme al proyecto elaborado en 1936 por el político ‎francés Leon Blum y el primer presidente de Israel, el sionista británico Chaim Weizmann.‎

El PKK está catalogado como organización terrorista en Australia, Canadá, Estados Unidos, Nueva ‎Zelanda, la Unión Europea y en Turquía –o sea, por la OTAN y los países de los «Cinco Ojos». ‎Esta clasificación no cambió después del derrumbe de la URSS y, dada su vinculación con el PKK, ‎las YPG deberían ser consideradas como terroristas. Pero sólo Turquía las cataloga ‎entre las organizaciones terroristas. ‎